Si definitivamente odio internet. Desde las 4 y pico ke estaba escribiendo el nuevo lunes digital y va y se peta el ordenador sin dejar borrador alguno. Me cago en la puta y por culpa del CABEZÓN del Rambo.
El último bareto de rock´n´roll abierto cuando los dolores de barriga y los purés de fruta imperan en la noche. Lugar de chustas, vamos.